Samanta007

PERSONALIDAD:

Seria la mayor parte del tiempo. Es bastante callada y no suele convivir mucho con los demás habitantes de Eel, aunque no es por ser grosera, realmente Samanta es demasiado tímida como para acercarse a los demás. Es bastante desconfiada, por lo que en todas sus misiones la verás siempre con las mismas personas. Tiene pocos amigos, pero su lealtad hacia ellos es inmensa.

HABILIDADES:

~Suele ser observadora y bastante analítica, lo que la vuelve una gran estratega~
~Experta en arquería. Su puntería suele ser perfecta~

ARCO:

Samanta posee un arco encantado. Cuando viaja, solo lleva su grimorio consigo, gracias al cual es capaz de invocar su arco. No necesita flechas, las invoca con un conjuro, solo necesita tensar la cuerda y fingir que ahí están. Las flechas aparecen conforme avanzan hacia su objetivo, y colisionan en una gran explosión de hielo. Es un arma muy poderosa que requiere mucha magia, por lo que siempre que usa su arco especial, Samanta termina exhausta Leiftan insiste en que no debería usarlo

~Apasionada de la lectura. Suele encerrarse en la biblioteca en su tiempo libre, por lo que en su mente habrá conocimientos de casi todo. Kero suele ser mi compañero de lectura~
~Alquimista. Incluso estando en la guardia sombra, ama la alquimia y la elaboración de pociones. Otro de sus pasatiempos favoritos es espiar a Ezrael mientras está en el laboratorio de alquimia (¡No le digan! Gracias a eso, he logrado descubrir secretos que no están en los libros)
~Conozco un conjuro que me permite controlar al enemigo. Solo lo miro a los ojos y lo obligo a hacer todo lo que quiera… no solo actuar, sino también pensar a mi conveniencia. La desventaja de esto es que solo logro usarlo con una persona a la vez… y la culpa que me causa eso es terrible~
~Ágil y rápida. Prácticamente su única ventaja en combate cuerpo a cuerpo.
~Su pequeña complexión la ayuda a esconderse fácilmente en cualquier sitio

~Habilidad secreta

Soy un Aengel. Mantengo el secreto desde que lo descubrí. Mis alas me dan la habilidad de volar, además de que son muy fuertes y resistentes, por lo que en caso de ser necesario, las puedo usar como escudo para protegerme, no suele doler.

DEBILIDADES:

~Está practicando el uso de la espada, katanas y dagas, pero realmente no se le da bien el combate cuerpo a cuerpo~
~Miedo a las alturas. Se siente más segura con los pies en la tierra (literalmente), por lo que en una misión de altura puede encontrarse un poco distraída. (Esto hace que su capacidad de volar sea prácticamente inútil)
~Culpabilidad al realizar el conjuro controlador. Suele sentirse terrible cada que manipula a alguien con ese conjuro, por lo que se niega a usarlo. En conclusión, no hay conjuro
~Débil. No exagero cuando digo que Milo podría ganarme jugando “fuercitas”… bueno, tal vez sí.
~Hace años, Miko nos mandó a una misión donde resulté maldita. No debo mentir. No es que no pueda mentir, sino que cada mentira vuelve mi cuerpo polvo de estrella, lo cual eventualmente podría matarme, por lo que suelo cuidar mucho mis palabras.

Debilidad secreta

~No quiero que se sepa que soy un Aengel, por lo que mantengo ocultas mis alas todo el tiempo. Esto lo hago con magia, lo cual consume mucha energía, así que me canso rápido.

Amigos

Miko: Es cierto que lo primero que intentó hacer cuando me conoció fue matarme… pero es Miko, ha hecho eso con muchos otros. No somos amigas ni nada por el estilo, sin embargo, ambas somos unas amantes de los dulces, lo que nos vuelve unas perfectas cómplices cuando se trata de conseguir manjares azucarados.
Leiftan: Siento completa confianza en él desde el inicio. En el momento en que lo vi pude notar una… conexión… y no, no me refiero a un enamoramiento, es más como… una conexión. Se volvió mi mentor desde ese día. Aunque no tiene mucho tiempo que ofrecerme.
Nevra: Sé que la personalidad de Nevra es un poco difícil (y algo insoportable para muchos), pero no es tan malo una vez que te acostumbras. Yo le sigo el juego del eterno coqueteo, lo que hace que nuestra interacción sea realmente divertida (y algo incómoda para quien nos escuche). Claro que solo es un juego que tiene con… básicamente todo el mundo. También es jefe de mi guardia, por lo que sus órdenes son ley… casi siempre.
Kero: No solemos hablar mucho, pero estamos mucho tiempo en la biblioteca, en completo silencio, ambos perdidos en nuestras lecturas… es una amistad un poco especial y diferente.

Lista negra

El resto del cuartel. Insisto la inexistente vida social que llevo me hace difícil convivir, además, tengo demasiados secretos que guardar como para arriesgarme a hablar de más.

The Origins

Un día desperté en medio del desierto, estaba oscureciendo y el frío se comenzaba a sentir. Mis ropas eran demasiado holgadas, ni siquiera parecían ser mías. Intenté recordar algo. ¿Mi hogar? ¿Mis amigos? ¿Mi familia? ¿Mi nombre? Nada, mi mente estaba en blanco.
Perdida y sin recuerdos, pensé que lo ideal sería levantarme y buscar un lugar donde pasar la noche, sin embargo, no confié en que mis piernas pudieran trabajar. ¿Cuánto tiempo llevaba ahí? A mí alrededor veo varias plumas negras revolotear con el viento y esconderse entre la arena.
-¿Quién eres tú?- escucho una voz detrás de mí.
Incapaz de responder, miro con atención a quien me habló. Un rubio que usa una camisa como si fuera una capa, y a su lado, a un hombre enmascarado que lleva una armadura bastante peculiar. En cuanto se dieron cuenta del estado en que me encontraba, decidieron ayudarme. Hablaron algo de “una buena aliada”, pero no puse mucha atención a su conversación.
Dos días después, me guiaron a la guardia de Eel, y me pidieron llegar al cristal. Con facilidad logré infiltrarme hasta el cuarto donde se encontraba. Quedé maravillada al ver el lugar, el inmenso cristal parecía llamarme, un sentimiento muy familiar apareció, aunque no sabría describirlo.
Miko y una docena de guardianes aparecieron, listos para defender el cristal hasta la muerte. Quedé paralizada ante la escena, realmente no esperaba algo tan grande. Antes de que ella pudiera dar la orden, él aparece, el mismo chico del desierto, y se ofrece a “ayudarme”. Un poco contra su voluntad, Miko acepta, y le ordena a Leiftan mantenerme vigilada.
Desde entonces le soy leal a él y a Ashkore.
Me uní a la Guardia Sombra, poco a poco fui involucrándome más con el cuartel, entrenándome y mejorando mis habilidades, volviéndome una fiel guardiana sombra, hasta que me percaté una terrible realidad. En el momento en que Leiftan y Lance lleven a cabo su plan, tendré que traicionar a Sombra. Me parte el corazón pensar en ello, solo espero que falte mucho tiempo para ello.

New Era

El día en que Lance y Leiftan discutieron, mi alma se partió. Me prometí ayudarlos a ambos, ¿qué haría ahora que no estaban de acuerdo?
Lance me pidió ayuda para su batalla, pero tuve que negarme. Le debía mucho, mi vida incluida, pero también se lo debía a Leiftan, a Nevra, incluso a Miko…Yo estaba completamente en contra de las acciones del dragón. Durante la batalla me aseguré que él no resultara herido (Una pequeña traición con la que tendré que cargar), pero también defendí a mis compañeros de guardia cuanto pude.
Después de la batalla final, y del sacrificio blanco, muchos Aengels y Daemons decidieron salir a la luz. Nunca imaginamos la cantidad de híbridos y/o puros que habría entre nosotros.
Por mi parte, aún mantengo el secreto conmigo. Mis alas siguen causándome pánico, no sé qué representan pero sé que no es nada bueno para mí. Sin embargo, el día de la batalla final vi luchar a Leiftan, la energía que emanaba… la oscuridad reflejada en sus ojos… ahora sé de lo que soy capaz realmente, tal vez sea momento de abandonar el plumaje blanco.