Había una vez en un río una planta de caléndula muy
bonita y parlanchina. Esta sabía muchos secretos de los
herboristas que eran muy antiguos y se negaban a admitir
ninguna de las profecías del río arcano.
Un día un tritón nadaba cerca y quiso comerse la planta,
desesperada llamó a una ninfa, pero no llegaron sus
serviciales a su rescate por la culpa de una mantícora
que estaba haciendo un ensordecedor ruido.
La noche llegó, fue cuando vio que él tritón acechaba
furtivamente entre las rocas, entonces la planta le
suplicó al dios de los bosques que hechizara al tritón
para que se petrificara, pero apareció un monstruo muy
terrorífico que acabó con sus miedos, una luz cegadora
hizo que todos se paralizaran al notar su presencia e
inmediatamente provocó un terremoto, derrumbando la
gran mayoría de ninfas que volaban demasiado cerca.
El tritón, enfadado, sacó una espada acuática, con una
sola blandida consiguió un golpe crítico hacia el
monstruo, pero luego este se reincorporó nuevamente,
rugiéndole y se abalanzó sobre su oponente
envuelto en una capa que flotaba en el aire.
No obstante, cuando el monstruo golpeó a tritón
le dijo: que no hiciera ruidos en la habitación,
al lado había un bebé que no podía dormir
debido a los cantos armónicos de las sirenas, entonces
tritón le cantó una canción de cuna, pero estaba algo
agotado con el esfuerzo de la última maniobra del
combate entonces... colapsó.
De repente, el río tenía una abertura
que mostraba la entrada
bonita y parlanchina. Esta sabía muchos secretos de los
herboristas que eran muy antiguos y se negaban a admitir
ninguna de las profecías del río arcano.
Un día un tritón nadaba cerca y quiso comerse la planta,
desesperada llamó a una ninfa, pero no llegaron sus
serviciales a su rescate por la culpa de una mantícora
que estaba haciendo un ensordecedor ruido.
La noche llegó, fue cuando vio que él tritón acechaba
furtivamente entre las rocas, entonces la planta le
suplicó al dios de los bosques que hechizara al tritón
para que se petrificara, pero apareció un monstruo muy
terrorífico que acabó con sus miedos, una luz cegadora
hizo que todos se paralizaran al notar su presencia e
inmediatamente provocó un terremoto, derrumbando la
gran mayoría de ninfas que volaban demasiado cerca.
El tritón, enfadado, sacó una espada acuática, con una
sola blandida consiguió un golpe crítico hacia el
monstruo, pero luego este se reincorporó nuevamente,
rugiéndole y se abalanzó sobre su oponente
envuelto en una capa que flotaba en el aire.
No obstante, cuando el monstruo golpeó a tritón
le dijo: que no hiciera ruidos en la habitación,
al lado había un bebé que no podía dormir
debido a los cantos armónicos de las sirenas, entonces
tritón le cantó una canción de cuna, pero estaba algo
agotado con el esfuerzo de la última maniobra del
combate entonces... colapsó.
De repente, el río tenía una abertura
que mostraba la entrada
Quando vedi una stella brillare nel firmamento,
pensa a me
con il cuore.
pensa a me
con il cuore.