Existe el otro mundo,
imaginario y mágico,
en donde se guarda 
todo un orbe de conocimiento.
Ese lugar es el Parnaso, 
paraíso 
de las nueve musas,
hijas de Zeus y 
de la diosa Memoria, 
quienes son protectoras
de las ciencias 
y de las artes
Ellas son la luz 
de nuestras creaciones
y este poema es prueba 
de sus dones.
Escribo estos versos
en tributo a ellas,
a las que invocare 
con ilusión 
y encanto a ellas:
Calíope, Clío, Erato, 
Euterpe, Melpómene, Polimnia, 
Talía, Terpsícore y Urania.
Ellas están aquí,
conmigo, 
danzando a mi alrededor
para guiarme con su luz
estos versos que compongo
con amor, ánimo y entusiasmo. 
Ellas guía mi mano 
y me dan energía 
en cada verso que hago.
Este poema se está acabando,
solo doy un último canto:
«Quien lea estos últimos versos,
le doy fe este fiel consejo 
"las musas nunca cerrarán su luz
al ser especial que lo necesita,
sino le dará la ayuda,
incondicionalmente,
que tanto se había esforzado,
para obtener su mayor sueño cumplido."»
Las musas regresan
a su paraíso,
para guardar la nueva creación
y esperar otra nueva innovación. 
La guardiana de abajo es... Orquídea
                Última modificación realizada por Kalaha (El 11-04-2022 à 15h19)
Quando vedi una stella brillare nel firmamento,
pensa a me
con il cuore.